lunes, 17 de octubre de 2011

DE NUEVO A LA SOMBRA


Hay veces que persigues una actividad durante mucho tiempo, y siempre parece darte la espalda por un motivo u otro. Y otras veces todo cuadra en un instante sin previo aviso y cuando menos te lo esperas. Este ha sido el caso de mi última salida. Desde mi regreso de Pakistán andaba desconectado de toda actividad, excepto de ir a la playa, pero tras hablar con Tato que estaba en Chamonix todo se acelero de manera drástica.
Creo que de mediados de Septiembre hasta octubre con sus días aún largos, temperatura suaves, pero que ya han solidificado la hume
dad del verano en las paredes en forma de hielo, tiempo estable y aproximaciones sin nieve, convierten en una muy buena época para hacer actividad en las paredes altas de los Alpes.


Esta vez nos decantamos por la vía "NO SIESTA". Como no, los incombustibles Mikel "Z Curtis" y Manu no podían faltar a la cita, así que quedamos en Montenvers, para subir para arriba juntos. Vamos con la idea de hacer en tres días la vía, eso se nota en el peso de las mochilas, durante la aproximación.
El primer día, al amanecer, sobre las siete empezamos a escalar, la primera parte esta un poco justa de hielo, hay alguna placa difícil de proteger, y en algún largo hielo negro fatigoso de escalar. Pasamos todo el día escalando por preciosas goulottes, de hielo a veces fino, interrumpidas por tramos cortos de roca difícil.
La noche se acerca y "dormimos" en una pequeña repisa tallada donde solo podemos sentarnos, con los pies colgando. Por sus conversaciones durante la noche, 20 metros por encima Manu y Mikel no parecen estar mucho mejor que nosotros, la vía hace honor a su nombre.
Al día siguiente, ya con luz, escalamos la parte mas "rocosa" de la vía, hay algún largo con roca muy mala y también, para mi el mejor largo de la vía junto con la "goulotte" característica de la parte de arriba. Un diedro fisurado, al estilo de la "Gabarru-Silvy" pero con una plancha de hielo fino a la izquierda que te ayuda a progresar y todo el vacío de las jorasses por debajo. Brutal!. Después se accede quizás la zona mas perdedora de la vía y nos hace perder un poco de tiempo, hay que buscar una travesía rocosa, un poco expo hacía la derecha, que da acceso de nuevo al hielo.

Así se accede a la parte alta de la vía, que es la que tiene mas hielo y transcurre por bonitas goulottes. Aquí el viento nos da de pleno. Mientras vemos que Mikel y Manu llegan a la salida, nosotros tenemos a la vista la soberbia lengua de hielo que da acceso a los tres últimos largos y que es mas vertical de lo que parece. Anochece, estamos cansados, bebemos lo que nos queda de liquido y nos tomamos los últimos largos con calma, para no cometer errores, la luna llena ayuda.
Final, abrazo de rigor con el Tato, tener un compañero de cordada como el, siempre es un lujo, y además el entendimiento es muy sencillo. Justo a la salida de la vía en la otra cara no sopla nada de viento del norte, pasamos un vivac muy agradable y sobretodo, esta vez estirados.
La claridad nos despierta y nos regala un amanecer de película, con las primeras luces coloreando el Montblanc y mar de nubes. Para bajar hay que ir dirección al oeste hasta un corredor por donde se rapela y da acceso a las rocas de "Reposoir", una de las zonas mas fotográficas de la zona.
La dificultad no siempre tiene que ir ligada a la belleza de una ascensión, pero en esta vía se cumplen ambas sobradamente.
Tras la vía, he estado pensando en la polémica ascensión de Tomo Cessen. Ahora que he repetido la vía, si tuviera que dar una opinión lo dejaría en un "y por que no". A nadie le extrañaría si por ejemplo Ueil Steck repitiera en solo "No siesta", el largo mas duro es en torno al M7 o M8. Ya ha escalado la Mcintery-Coltón (M5) en poco mas de 2 horas. Tomo Cessen aseguraba haberla escalado en 14 horas, si pierdes tiempo en autoasegurarte en los largos mas duros, es un horario muy razonable. Ya se, eran otros tiempos, pero siempre ha habido gente adelantada al suyo.