DIRECTA AMERICANA

Fructífera semana de escalada por Chamonix. Allí nos reunimos Samuel Gomez y Carlos Simes "Cuca" y yo. Con Samuel habíamos coincidido en muchos sitios pero nunca habíamos podido escalar  juntos, a Cuca no lo conocía, así que, que mejor que una buena "alpinorrada" para conocernos. Nada mas llegar nos vamos para el Dru, el objetivo la Directa Americana. Esta vía fue mi amor platónico desde que me inicie en la escalada, la espera ha merecido la pena.

 En mi primer viaje a Chamonix también quería escalar esta vía histórica, pero dos semanas antes de llegar, parte de el Dru se vino abajo..... Desde ese verano (2005), no había vuelto a visitar el macizo de Chamonix en esta estación, la aglomeración de gente y la inestabilidad del terreno por el calor, me mantenían lejos. Supongo que con el tiempo se me ha ido olvidando y este año he vuelto. La vía fue abierta por los norteamericanos Royal Robbins y Gary Hemming, en tres días en el verano del 1962 siete años después que Bonatti abriera su mítico Pilar. Se trajeron de su Yosemite las técnicas y material para abrir la Directa. Clicando Aquí un relato de la primera repetición española de la Directa Americana, como han cambiado los tiempos.

"Primer largo después del las viras"

Hace dos inviernos escalamos el corredor Norte directo del Dru, al mismo tiempo en la cara oeste Tato y Pelut progresaban por su vía. Vivaqueamos debajo de la cara Oeste y daba la sensación de que la pared estaba estabilizada...Así que cuando Samuel me propuso escalarla pensé que no era mala idea, antes de que volviese la inestabilidad a la pared (si es que se ha ido) y se llevara por delante a esta vía como ya pasó con el Pilar Bonatti.

"Largo Dulfer 45 mts"

Dormimos justo después de la ferrata en el cruce del camino que va hacia el refugio de Charpoua, donde dejamos un deposito de material. Al día siguiente tras dos horas de aprox nos plantamos debajo de la imponente cara Oeste del Dru.  Para acceder a la vía, encontramos que los crampones y un piolet son obligatorios. A las 8 empezamos la escalada no demasiado temprano, pero íbamos con la idea de disfrutar la escalada y un vivac. Los primeros cinco largos son los mas feos de la vía, toda esta zona tiene encima un nevero que en caso de calor puede desprender piedras.

 A partir de aquí comienza el festival, la linea se pone vertical, el granito es perfecto y la escalada preciosa muy física todo el rato sobre muy buenas fisuras, festival de empotres, más de los que esperábamos. Todos los largos son muy buenos, el undécimo 45 mts de bavaresa de manos totalmente vertical, de los mejores junto al diedro de 90 mts.

 El día pasa volando mientras disfrutamos de la escalada y nos plantamos en el famoso diedro de 90 mts entre la niebla. Justo antes hay un sitio para vivaquear y nieve. Aquí "Cuca" se merienda los dos largos, encadenandolos de primero con su respectiva mochila a cuestas (comida, ropa, botas, crampones y piolet) como en toda la vía, chapeu como dicen por allí.
 Muchas cordadas rapelan desde aquí. Justo al finalizar el diedro, hacia la izquierda nos pasamos por unos buriles roñosos a la cara Norte, por lo visto a partir de aquí la directa Americana quedo afectada por los derrumbes del 2005.
  Después de la travesía, nos encontramos con una buena repisa para vivaquear los tres, sin saber lo que nos depara la Alain y con la visibilidad que reina, optamos por pasar la noche aquí. 

"En el diedro de 90 mts"

"Travesía hacia la Norte"

"Cómoda repisa"

Nos despertamos con calma, pero la escalada empieza con susto, justo cuando me dispongo a empezar a escalar, miro hacia arriba por un silbido de piedras y veo un bloque enorme que choca con unas rocas y se convierte en una bomba racimo que viene para nosotros, nos pegamos a la pared y por suerte el susto no pasa de aquí. Esta va a ser la tónica de todo el día, bloques sueltos en las zonas tumbadas donde no hay nieve y escalada lenta para no tirar nada para abajo.

Me imagino que años atrás cuando esta vía como otras nortes clásicas del macizo se escalaban en verano, tenían mucha mas nieve y hacia mas frío, pero con el cambio climático, la nieve a dado paso a autenticas escombreras que hacen muy peligrosa su escalada en verano, sobretodo, si llevamos otra cordada por encima. 

La reseña que llevábamos de la Norte, no se acababa de ajustar a la realidad, nos embarcamos. En un punto llegamos a un hombro por lo que parecía ser una vía, a un lado tenemos la cara Norte y al otro lado toda la cara Oeste y su enorme desprendimiento, por encima desplomes. Samuel intenta sin éxito buscar una salida, tras varios intentos sin éxito por diversos sitios, optamos por Rapelar hasta encontrar el trazado correcto.
 Una chimenea con roca muy descompuesta y tres largos con algo de nieve, nos dejan en una ventana donde cambiamos de orientación y pasamos a la vertiente Sur, creyendo estar ya debajo de la cima. Allí nos juntamos con una cordada de franceses que viene detrás nuestro y por el otro lado con un guía y su cliente, que vienen haciendo la travesía de los Drus.

Como no tenemos muy claro por donde se sube a la cima, hay cordinos de abandono por todos los lados, nos relajamos y dejamos pasar a los locales. Tras casi una hora observamos como suben y bajan, buscando sin éxito la puerta de acceso a la cima, viendo que se hace tarde, decidimos probar suerte por otro sitio y tras tres largos (todavía), acabamos encontrando finalmente la cima del Petit Dru, y unas vistas impresionantes del macizo.

"Ultimo largo de la Pierre Allain"

Como no conocemos la bajada y pensando que nos pillará la noche a mitad de ella, decidimos vivaquear en la misma cima, junto a la virgen. Este vivac ya no estaba previsto, cenamos solo unas barritas, tampoco tenemos mucha ropa de abrigo, Samu y Cuca llevan una funda de vivac respectivamente. Durante toda la noche sopla un viento intenso, que hace bajar la sensación térmica pese a ser verano. Samu es el peor parado incluso algún dedo del pie le queda resentido después del frío vivac, yo doy gracias una vez mas (y van...) a un saco de 500 gramos de pluma inseparable desde aquel verano del 2005.

"Samu pensando en la noche que le espera"

"Vistas desde la cima"

Descenso: Las "Flames de Pierre" tienen muy mala pinta, en invierno lo mas rápido seria bajar por el corredor Norte, pero ahora la bajada consiste en desescalar el petit Dru por el terreno mas fácil en dirección a la Brecha que separa los dos Drus Una vez en la brecha, hay que escalar el Gran Dru en unos dos o tres largos mas depende del roce, por la fisura de la Z. En la cima del Gran Dru, hay que dirigirse en dirección E/NE por una arista e ir descendiendo poco a poco hasta encontrar una primera instalación de rapel, que esta en unas rocas justo encima del corredor Norte. Tras diez rapeles llegamos al glaciar y en una hora mas llegamos al pequeño y mítico refugio de la "Charpoua" donde hacemos noche para ver si nos daba para escalar  "Sala du te" En la Moine, pero esa noche empezó a llover y con ganas.

"Buen croquis del descenso"